Croacia.
Nos recibe con una multa en Pulla por no poner el tiquet del parking (imposible, sin tener kunas ni admitir tarjeta de crédito). Para evitar que nos fuésemos sin pagar la multa los gendarmes (de paisano) nos esperaron pacientemente a que volviésemos. Se cobraron 15€, a cambio nos dieron un recibo de dudosa legitimidad.
Pulla que es una ciudad que tiene un anfiteatro romano muy reconstruido que da el pego total. Se nota que hemos salido de Italia. Las visitas a los monumentos están mal organizadas y la gente no sabe por dónde ir. Al final encontramos unas catacumbas llenas de vasijas romanas del siglo I y de artilugios como prensas, molinos etc., estos ya con pinta de estar hecho hace un ratito. Partimos hacia las cascadas de plitvicka jazera que Cristina hija ha visto en internet que son muy bonitas. Nos cae la noche justo antes de pasar un peaje a la boca de un túnel.
Las autopistas de Croacia parecen que las acaban de poner, aunque de repente te das cuenta de que en el otro carril vienen coches en sentido contrario, oye, sin avisar ni nada. El paisaje que nos encontramos hoy se podría decir que es la orografía de Galicia con la vegetación de los pirineos. Tiene pinta de caer unas nevadas impresionantes.
Después de una noche pegaditos a la autopista, llegamos a dicho parque natural plagadito de cascadas naturales y de gente. Tras nuestros habituales problemas para aparcar “el muerto “que es nuestra autocaravana nos disponemos a sumergirnos en una cola interminable para ver una serie de cascadas muy fotogénicas. El “peaje” incluye un paseo en barco y la vuelta en burra mecánica, las delicias de los niños. Partimos con mucha prisa para pasar la noche en alguna parte de la costa croata para ver si es tan estupenda como dicen las guías. En un acto desesperado entramos en un camping y que sea lo que dios quiera. La matada es considerable y los niños hacen la cena y lo recogen todo, todo y todo. Me acuestan y me dan un beso, a veces pienso que la educación sirve para algo…
Amanecemos con la intención de pasar un día relajado. El camping es tan grande que tardamos 15 min en recorrerlo en bici hasta llegar a la playa. El adriático es como el mar menor pero en mayor, un charco de sospechoso olor para el que añora aguas salvajes. Competimos con multitud de alemanes pubertos y no tanto para emplazarnos en la playa. A los 5 minutos decidimos ir a la piscina a ver si el panorama está más despejado. Mis esperanzas no se ven cumplidas y nos volvemos a sumergir en una griterío piscinero multilingüe de los más internacional. Nosotros como siempre dando el toque exótico entre tanto cabello rubio, alto y bronceado. Por la tarde echamos un partido de futbol entre nosotros, los rubios contra los morenos. Ganan los Morenos “como siempre” aunque Carlos dice que metió más goles. Me llama la atención una infante teutona con la camiseta de la roja de Iniesta. Al final nos vamos con la sensación de no haber disfrutados de ninguna playa decente, la que nos tocó apenas tenía 50m de arena prefabricada donde fue imposible clavar la sombrilla.
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ESPERANDO LA FUNCION |
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SIN COMENTARIOS |
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THE BIG WATERFALL |
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LA MISMA PERO TODOS |
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PERMISO.... |
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ARQUITECTURA MODERNA A MEDIO HACER |
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¡¡FELICES EN EL RESORT¡¡ |
Vaya. Parece que manejarse por Croacia es algo asi como andar por plena Gran Vía, en hora punta, petada de gente de todo tipo y condición. ¿Agobiante la experiencia......o fuisteis capaces de disfrutar a pesar de todo?
ResponderEliminarMe dejaba en el tintero una duda ¿qué es eso de que en las autopistas "vienen coches en el carril contrario"? ¿Son o no son autopistas?
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